La semana pasada se constituyó formalmente la “Mesa Parlamentaria, Ciudadana y Académica” con el objetivo de desarrollar un diálogo orientado a la generación de acuerdos, la que incluye voces y actores que, para sus representantes, han sido excluidos de la instancia liderada por las fuerzas políticas tradicionales y respaldada por el Gobierno.
La también denominada “Mesa Paralela”, está compuesta por parlamentarios provenientes de distintos sectores, que juntos representan un espectro político amplio y variado. A esta estructura se han sumado con fines colaborativos, varias organizaciones ciudadanas de distinta naturaleza y objetivos, que vienen trabajando en el proceso constituyente desde su comienzo, los que si bien manifiestan no haber sido escuchados y sostienen posturas críticas respecto a cómo se ha administrado hasta ahora el proceso, se han propuesto persistir por esta vía recién abierta.
En lo que concierne al rol de quienes participan del diálogo, tanto desde la esfera partidaria como desde la ciudadanía organizada, “La Mesa” aclara que cada cual es representante de una fuerza política desplazada por la instancia oficial, por lo que su objetivo es dar voz a los excluidos en el marco de un diálogo democrático, horizontal e inclusivo. En particular, respecto a las especulaciones sobre el rol del Partido de la Gente y de Marco Parisi, los voceros de “La Mesa” hacen hincapié la horizontalidad de su modelo de trabajo, al cual todos se han sumado en igualdad de condiciones. Para constatar esto, se invita a seguir el detalle de los diálogos a través de los documentos de acuerdo que estarán disponibles luego de cada sesión de trabajo.
Una de las motivaciones compartidas por los actores participantes es el espíritu crítico con que se observa el trabajo oficial desplegado hasta ahora. En general, su diagnóstico observa que cada sector político ha interpretado según su particular conveniencia la contundente votación que eligió descartar el texto recién redactado. Destacan que pretender hacer una única lectura que exprese la voluntad ciudadana solo sería reflejo de intenciones partidistas o agendas particulares. De esta manera, cada sector político tradicional ha esbozado su propia fórmula para organizar el próximo trabajo constituyente.
En la primera sesión realizada la semana pasada, las intervenciones, tanto de actores políticos como ciudadanos, abundaron en la necesidad de trabajar en las reformas que requiere la ciudadanía y evitar llevar la discusión constitucional según las agendas de los partidos políticos. En esta línea, se destacó la constatación de la tesis normativa del artículo 142 que dio vida al proceso constituyente recién abortado, que determinaría que el proceso constitucional-jurídico y el mandato ciudadano se ha terminado al ganar la opción rechazo. Sin embargo, continúan, quedaría pendiente un debate social y político de cierre que indique un nuevo camino. De esto se extrae que son normativamente posibles dos vías para encauzar una salida a la discusión. La primera pasaría por reformar la actual constitución vía parlamentaria o comenzar. La segunda pasaría por inaugurar un nuevo proceso desde el plebiscito de entrada que determine el mecanismo. En este sentido, La Mesa sostiene que hay apertura a posibilidades en el diálogo.
En cuanto al espíritu de trabajo de la mesa, se convino que el objetivo es complementar la discusión, aportando a la determinación de un mecanismo que tome en cuenta la visión ciudadana y las necesidades de nuestra sociedad, tomando en cuenta en actual contexto y con foco en éxito del resultado.
Finalmente, los primeros acuerdos de trabajo comunicados por la coordinación de la mesa paralela en sesión del 06 de octubre fueron:
- Que el artículo 142 de la constitución indica indiscutiblemente el fin del proceso constitucional, en orden al resultado del plebiscito de salida del 04 de septiembre pasado, dejando sin efecto el proceso y todas las leyes que lo complementaban.
- Que se debe exigir a toda la clase política, principalmente al Gobierno, atender prioritariamente las urgencias sociales que aquejan a la gente y a nuestra sociedad, y que no deben ser desplazadas a un segundo plano por las negociaciones sobre el proceso constitucional.
- Que se cita a una nueva sesión para el jueves próximo de 10 a 14 hrs.
La próxima sesión de trabajo de la mesa se realizará este jueves 13 de octubre para escuchar a otro grupo de organizaciones de la sociedad civil e intentar canalizar sus demandas y preocupaciones en un documento que será expuesto ante el Parlamento, esperando que sean valoradas y consideradas a la hora de concretar los acuerdos que darán forma al nuevo programa.