La Comisión Internacional de Juristas (CIJ), en un informe reciente solicitado por la ONU, ha propuesto la despenalización global de una serie de comportamientos relacionados con el sexo, el VIH, la expresión de género, la posesión y el consumo de drogas, la indigencia y la pobreza.
Según el informe, estas conductas son una cuestión de derechos humanos y la criminalización “es perjudicial para quienes se dedican a tales actividades”, al imponerles un estigma social.
La criminalización suele tratar de reprimir conductas consentidas, identidades estigmatizadas y estatus personal. La edad a la que una persona podrá dar su consentimiento legal para tener relaciones sexuales varía según los diferentes Estados en Estados Unidos, y el informe pide la despenalización de las relaciones sexuales entre adultos y menores.
Despenalización de las relaciones sexuales entre adultos y menores
“Con respecto a la aplicación de la ley penal, cualquier edad mínima prescrita para el consentimiento sexual debe aplicarse de manera no discriminatoria. La aplicación no podrá estar vinculada al sexo/género de los participantes o la edad de consentimiento para el matrimonio”, y agrega: “La conducta sexual en la que participen personas por debajo de la edad mínima de consentimiento sexual prescrita en el país podrá ser consentida de hecho, aunque no de derecho. En este contexto, la aplicación del derecho penal debe reflejar los derechos y la capacidad de las personas menores de 18 años para tomar decisiones sobre la participación en conductas sexuales consentidas y su derecho a ser escuchadas en los asuntos que les conciernen”.
El informe también propone que la prostitución y el proxenetismo no deben ser considerados delictivos, siempre que se realicen entre adultos que consientan. Además, la no divulgación del estado serológico respecto al VIH, la exposición al VIH o la transmisión del VIH solo debe considerarse delito en los casos de transmisión intencional del VIH.
El informe no brinda protección a los no nacidos y es decididamente pro-aborto. Este informe, en todos sus aspectos, aboga por la despenalización de ciertas conductas y comportamientos, siempre que se realicen con consentimiento y sin coerción, fuerza o abuso.
