- El parlamentario integrante de la Comisión de Transportes, enfatizó en que también se debería fiscalizar el funcionamiento de los recorridos, las normas de tránsito, entre otros factores que afectan la seguridad vial.
Recientemente, desde el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), anunciaron que aumentarán y endurecerán las sanciones para los buses del sistema RED en la Región Metropolitana, con el objetivo de elevar el estándar de calidad de las micros que circulan por el gran Santiago y sacar de recorrido las máquinas que ya no cumplan con las condiciones de seguridad para el traslado de pasajeros.
Tras este anuncio, el diputado e integrante de la Comisión de Transportes, Juan Irarrázaval, mencionó que “la fiscalización vial es un viejo anhelo de la ciudadanía, no solamente por la calidad de los buses que están circulando, sino también por la seguridad. Y en pro de la eficiencia, la fiscalización de los buses en vez de hacerse desde el Plan Nacional de Fiscalización, podría concentrarse a través de la Dirección de Transporte Público Metropolitano (DTPM), que efectivamente, es la que coordina todas las empresas de transporte que funcionan en el sistema RED y así el esfuerzo del plan de desplegar esta cantidad de inspectores en territorios, con lo que eso significa en costos, podría ser útil a otros tantos serios problemas de transporte que padecemos”.
El representante de las comunas de Melipilla, Talagante y Maipo, recalcó que “si está la posibilidad desplegar esta gran cantidad de inspectores, ojalá que sea no solo para ver la calidad de las micros, sino para ver una serie de cosas más, como el funcionamientos de los semáforos, el cumplimiento de las normas viales por parte de los automovilistas, ya vemos todo el problema que hay con la circulación de motos irregulares, de autos que no tienen patente, entre otros”.
La iniciativa impulsada por el MTT busca pasar de las 328 fiscalizaciones mensuales, que se hacen actualmente, a 1.380 chequeos en un mes, principalmente enfocado en los terminales de buses y otras 1.800 fiscalizaciones en las calles.