Durante la madrugada de hoy jueves, a la 1:40 horas, se presentó en la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) Jeremy Rodríguez Carvallo, chileno de 24 años, que habría confesado su participación como autor en la agresión con un fierro al sargento de Carabineros Carlos Retamal, quien falleció producto de un daño neurológico masivo debido al ingreso del objeto a su cráneo.
El detenido en primera instancia habría reconocido la autoría, sin embargo no prestó la declaración para confesar formalmente los hechos, luego de que su abogada defensora interviniera.
Este hecho ha causado especial conmoción en la provincia de San Antonio. El Sargento Retamal era un funcionario muy querido dentro de la institución y también por la comunidad. Llevaba 25 años en Carabineros y además era un reconocido bombero de Melipilla, labor que desempeñaba paralelamente desde los 15 años de edad.
Durante la mañana de este jueves, Carvallo será puesto a disposición de la fiscalía para su formalización.
Los Hechos
Carabineros recibió el sábado por la noche una llamada alertando que se estaban realizando carreras clandestinas en el sector Malvilla, en la comuna de San Antonio. Acudió Retamal junto a un colega, ambos en moto. Al llegar, el grupo de conductores arrancaron en sus vehículos y, para evitar ser detenidos, desde dentro de uno de los automóviles involucrados el sospechoso tiró una llave de cruz contra Retamal, quien en ese momento tenía levantada la visera del casco institucional.
Una de las puntas del pesado objeto ingresó a la órbita de uno de sus ojos, traspasando el cráneo y dañando gravemente la masa encefálica, lo que lo dejó inconsciente de inmediato y debió ser derivado a Dipreca en Santiago por la gravedad de sus lesiones.
Los médicos del hospital indicaron de inmediato que el daño neurológico era muy probablemente irreversible, por lo que anticiparon desde su ingreso que muy probablemente no resistiría con vida mucho tiempo, y así fue cuando durante la noche del martes finalmente falleció.
Velatón
La noche del miércoles fue especialmente emotiva para muchos uniformados de la institución que sintieron el respaldo de la ciudadanía tras el fallecimiento de uno de los suyos. Frente a diferentes comisarías y retenes a lo largo de todo el país, llegaron grupos de personas que prendieron velas, rezaron e incluso frente a la Escuela de Carabineros en Santiago, se tocó el clarín en señal de respeto del oficial fallecido.
En varios puntos de las carreteras también llegaron algunas patrullas y carros de bomberos para homenajear a un Carabinero, bombero y padre de familia que fue asesinado mientras cumplía su deber.
