El Dr. Aliro Galleguillos analizó los factores estructurales, reproductivos y sanitarios que explican la caída de los nacimientos en el país, y urgió al Estado a aplicar políticas que enfrenten el envejecimiento de la población.
El Dr. Aliro Galleguillos abordó en profundidad las causas del descenso sostenido de la natalidad en Chile, fenómeno que se ha convertido en una amenaza para la sostenibilidad del sistema de salud. En 2024, nacieron apenas 154.000 personas, mientras que fallecieron 126.000. Con una tasa de fertilidad de solo 1,03 hijos por mujer, Chile se ubica por debajo del nivel de reemplazo poblacional.
Factores estructurales y sociales detrás del colapso demográfico
Consultado por los factores estructurales que explican esta caída, el especialista señaló que “la crisis de natalidad no solo afecta a Chile, sino al mundo entero. Políticas globalistas, el alto costo de la vida y el aumento de la esperanza de vida han llevado a que las mujeres posterguen la maternidad. Muchas piensan en tener un solo hijo después de los 35 años, cuando la carga ovárica ya disminuye considerablemente, reduciendo las posibilidades de concebir”.
En esa línea, advirtió que no basta con promover la fertilidad biológica, sino que “es necesario construir un entorno propicio, que motive a las personas a formar familia en condiciones dignas y estables”.
Cambios culturales y salud reproductiva
Desde su experiencia médica, el Dr. Galleguillos apuntó a un cambio profundo en las prioridades sociales. “Se ha promovido una cultura que desincentiva la procreación. Hay muchas personas jóvenes que prefieren tener mascotas antes que hijos. A eso se suma el masivo uso de anticonceptivos —orales, inyectables, implantes—, que han reducido la fertilidad efectiva”, afirmó.
Asimismo, agregó que otro elemento influyente ha sido la aplicación de la ley de aborto en tres causales, en especial la tercera causal por violación. “Muchos profesionales observamos que esta figura se está utilizando como método anticonceptivo. Al no exigir la denuncia formal del violador, basta con una declaración para acceder al aborto, lo que ha elevado significativamente su uso. Esto debe revisarse con urgencia”.
Además, advirtió sobre la escasez de especialistas: “Solo entre 19 y 22 hospitales en todo el país cuentan con profesionales capacitados para diagnosticar malformaciones fetales graves. Esto podría estar provocando abortos de fetos viables por falta de evaluación adecuada”, alertó.
Sistema de salud bajo presión por el envejecimiento
Sobre el impacto sanitario del envejecimiento acelerado, Galleguillos fue claro: “La población vive más, pero con múltiples enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes y obesidad. Esto genera una carga inédita para un sistema de salud que ya está saturado. Más del 83% de los chilenos pertenece a Fonasa, pero esta red apenas logra cubrir al 70% eficientemente”.
Finalmente, el médico insistió en que el país necesita una respuesta estatal urgente ante este nuevo escenario demográfico. “Si no se crean políticas de salud pública acordes a la realidad del envejecimiento poblacional y la baja natalidad, Chile no podrá garantizar un estándar de salud digno y sostenible. El Estado está al debe y las consecuencias ya las estamos viendo”, concluyó.
