Recientemente, una apoderada denunció que en el Colegio Adolfo Beyzaga Ovando, en Arica, se impartió una charla sobre sexualidad a estudiantes de quinto básico.
Dicha apoderada afirmó que el contenido de la charla, realizada por el Centro Regional de Información, Prevención y Apoyo a la Consejería en VIH e ITS (CRIPAC) de la Seremi de Salud de Arica y Parinacota, habría incluido un cuestionario donde se les preguntaba a los alumnos y alumnas preguntas explícitas respecto a su actividad sexual, si están en una relación de pareja, al uso del condón, entre otras.
Esta situación habría generado un malestar entre los estudiantes, puesto que los padres manifestaron que sus hijos e hijas sufrieron malestares físicos, situaciones de stress, nerviosismo, dificultades para conciliar el sueño, y en general se manifestaron perturbados ante el contenido expuesto, que incluyó maquetas “gigantes” de los órganos reproductivos masculinos y femeninos, lo que les causó gran conmoción, atendida su edad.
Frente a esto, la diputada y presidenta del Partido Social Cristiano, Sara Concha, aseguró que “me parece inconcebible los hechos que ha denunciado una apoderada en el norte del país. Por un lado, esta charla de educación sexual fue entregada por una entidad no calificada. Acá hay muchas personas que tienen que dar respuesta, primeramente el colegio donde se impartió esta charla, por ser los que autorizaron la entrada de esta entidad que imparte este material no acorde a los niños”.
Las parlamentarias Concha y Muñoz informaron que se ofició al Ministerio de Educación, la Subsecretaría de Educación, la Superintendencia, la Defensoría de la Niñez para que se pronuncien sobre lo ocurrido. “Aquí se está vulnerando algo tan importante como el derecho preferente de los padres a educar a sus hijos, porque no se les consultó y además se hizo con alguien que no está calificado. Esperamos tener respuestas y que se pueda tomar cartas en el asunto, para que no vuelva a suceder esta situación que ha afectado a niños y niñas de 9 a 10 años”, dijo Sara Concha.
Asimismo la diputada Francesca Muñoz y miembro de la comisión de familia de la Cámara sentenció “me parece muy grave e inaceptable esta situación, no es posible que se realicen actividades de este tipo, con personas externas al curso, quienes abordaron con los niños temas de sexualidad no de acuerdo a su edad y vulnerando así los derechos de los niños y el de los padres a educar a sus hijos, es definitivamente una vulneración de derechos y una imposición ideológica que debe sacarse de la educación y la salud. Los padres no fueron involucrados, tal como ocurrió en agosto del año pasado, cuando en Talcahuano, menores también de quinto año fueron sometidos a un examen físico por parte de personas externas al plantel”.